Yo escribo, tu escribes, el escribe, nosotros escribimos. Todos leemos!!

Los comentarios son bienvenidos, creo que son incluso necesarios. Comenta con menta por favor.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

11 de noviembre dia del recuerdo


Originalidad, inovación, inventiva, creatividad... Sacar el conejo del sombrero o llenar la página que antes estaba blanca; en esto parece írseme el día, dias de páginas blancas inacabables, arrancadas de cuadernos que nunca se agotan.

Dias como mi nombre, dias de lucha, dias de silencio, de soledades, de abandonos; dias con páginas que les corresponden, con cantos guerreros, con líneas y sin palabras, con olvidos.

Ayer me lamentaba de esta soledad tan sola en la que no me encuentro, ni me oigo, ni me veo; hoy me pregunto si la resurrección llegó en algún momento del crepúsculo o del amanecer, si hoy cuando me veo en el espejo soy la sombra de lo que ayer no ví o la intuición de lo que otros verán de mí. Pues yo sé que esta soledad es mi única pertenencia, la que no me abandona, la maleta vacía que no me deja llevar mas equipaje, el grito que no me deja oirme cuando hablo, la sombra que vela los espejos y en la que me escondo de mi misma.

¿Qué verás de mi cuando me leas? ¿Me verás cuando me leas? Porque si es así y la visión es un regalo pagado con palabras, entonces voy a escribir sin parar, voy a llenar mis dias de escrituras interminables, voy a vestirme de palabras voy a alimentarme solo de abecedarios y de tinta.

Yo no me veo cuando escribo, tampoco ahí me reflejo; mas bien parece que me proyecto y que mis palabras me mandan a otra parte y de nuevo estoy en el abandono, esperando siempre ser descubierta por mi propia voz, y al mismo tiempo con miedo de ese muro blanco, como papel gigantesco en el gual volverme visible. Y seguro que si eso ocurriera, tampoco sería yo, pues la distancia me ha distorcionado, la proyección me aleja y definitivamente me pierde.

Y no son confesiones, son silencios que registro con la confianza de saber que ni yo misma me leo, ni yo misma me escucho, ni yo misma me acompaño, pues esa es la soledad tan sola de la que no logro despegarme. Creer que nadie nos lee, creer que nadie nos oye, creer que nadie nos ve y saber que siempre hemos sido olvido.






sábado, 2 de mayo de 2009

jugar a ganar y perder

A lo mejor (como de costumbre) ando descubriendo el agua tibia...   cuando me di cuenta del juego que estamos jugando.

 Al menos ya se cuál es mi problema, pues yo pertenezco a ese grupo de los que les encanta jugar, pero que no jugamos para ganar, solo para jugar, con lo cual no me pongo brava si pierdo aunque me ponga contenta si gano.   Los que juegan para ganar nos dicen que eso no es cierto, que decimos mentiras, pues ellos creen que todo el mundo es como ellos, que solo están bien cuando ganan y ganan y ganan.

 Ganar y ganancias son de la misma familia, con lo cual la luz quedó prendida y si bien en medio de la pieza había ganancias, también había bastante pobreza.  Siempre es así, salvo en los deportes de equipo, por cada ganador siempre hay más de dos perdedores.

 ¿Cuánto hemos perdido?  La crisis que vivimos no proviene de ninguna carencia, solo de una cesación de triunfos, de haber dejado de ganar, de no saber bien donde está la carrera, de perder los premios.  Para mi que podríamos llamarla la primera crisis lúdico-económica del planeta.

 Y ella me dice que por primera vez en la historia (esta es una expresión que se usa mucho) los seres humanos llegan a la edad adulta en medio de una condición infantil de juego.  Luego de 10 mil años de maduración, la edad de bienestar a permitido a los niños gobernar y extender sus negocios, y los niños que han jugado por los últimos 50 años, de repente han tenido un momento de miedo.

 Como todos los niños, ellos también se asustan fácilmente, corren, se esconden, lloran, pero no llaman a sus padres pues algo les dice que lo que han hecho no es del todo bueno, así que solo se esconden, asustados.  Y momentáneamente el planeta ha dejado de jugar y la lúdica-económica se ha parado.  (Bueno, ni me pregunto si los padres existen, pues tengo la impresión que están todos muertos, hace rato)

 Esa es nuestra crisis.   ¿Es que seguiremos jugando después de esto?  ¿es que necesitamos a papá para que nos corrija?  o es solo que debemos encontrar la forma de hacer viable este juego eterno...

 

 

miércoles, 28 de enero de 2009

Introducción

Mientras Ulises se debate en alguna playa lejana o mientras busca en las estrellas el camino de regreso a los brazos de sus seres queridos, o mejor de su amada, su amada y sus seres queridos, por cierto no tan queridos, se debaten en un banquete sin fin.

¿Porqué esperar a Ulises? ¿Porqué soñar con el y enganchar en cada hilo la esperanza?

Este blog nace en medio de esa espera eterna que se hace y se deshace de un hilo, que se consume como banquete, mientras paradójicamente languidece y extiende el ayuno.